lunes, 24 de mayo de 2010

¿Burundanga?

La primera acepción del DRAE para la palabra "candanga" es "diablo". Pero aquí en Venezuela "candanga" es algo que está que arde, que es un problemón, que es difícil. El nombre, entonces, no pudo estar mejor escogido para el estreno del presidente en Twitter.

Digan lo que digan, la situación por la que atraviesa el país es muy tensa, muy inestable y muy, muy delicada. El acelerón del comunismo no está dando los resultados que el Gobierno esperaba y como siempre hacen, buscan echarle la culpa a los mismos de siempre: los americanos (OF COURSE!), los burgueses (no los boliburgueses), los gobernadores y alcaldes de oposición (que lo que quieren es real, cuando deberían pedir qué ¿chipichipis?), las ONG's (para descalificar denuncias como las de Rocío San Miguel y Franklin Brito), los escuálidos (todo el que protesta) y siga usted la lista, amigo lector. El Gobierno no asume -y por el camino que va jamás asumirá- ni su incompetencia ni su ineficiencia y mucho menos su rotundo fracaso. Por cada acierto tiene mil desaciertos: así no puede marchar un país.

Como no pueden poner nada a funcionar, expropian. Pero expropiar no resuelve el problema de productividad. ¿Qué ha sido de Cemex? ¿De las empresas de la Costa Oriental? ¿Del Hipermercado Éxito? ¿De Sidor, Alcasa, Venalum, Cantv? ¿De todos los hatos productivos que han tomado? Cuando lo que expropian -o toman por la fuerza- no funciona, importan. Para importar necesitan dólares (sí, de esos que la diputada Varela cree que no se necesitan si uno vive en Venezuela). De ésos se van millones al día, no necesariamente a través de las casas de bolsa, sino en maletines en aviones oficiales donde, si se descubren, no pasa nada.

Es tanta la ineptitud que en once años no pudieron procurarles a los niños de Nirgua una piscina para que pudieran bañarse, ni un lugar bonito donde pudieran jugar, y terminaron robándole la finca a Diego Arria. Paséese por Nirgua y sus alrededores para que vea el montón de terrenos donde hubieran podido montar un lugar como La Carolina... Pero es probable que ellos no pertenezcan a alguien que el régimen considere enemigo.

Vivimos en un país candanga, sin duda. Y no pasa nada. Es como si a la población y las instituciones les hubieran echado somnífero... ¿Burundanga?

7 comentarios:

  1. Excelente articulo. Cada palabra, cada letra en su sitio. No dice ni mas ni menos sino lo que debe decir. La felicito! Muy bueno!

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  3. I am afraid the time to oust HCh from the Venezuelan government has gone time ago.
    Regarding Chavez's Caribbean revolution, just a quote from Joseph Goebbels:
    “Whoever can conquer the street will one day conquer the state, for every form of power politics and any dictatorship-run state has its roots in the street.”
    Cheers,
    Luis

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  4. Muy bueno el articulo rico en contenido pero pobre en realidad... Sí!, nos están matando, nos estamos muriendo... que nos invadan, que alguien haga algo, pero rápido... Si eres buena dejas este comentario, si eres mala lo quitas...

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  5. Carolina Jaimes Branger24 de mayo de 2010, 3:03 p. m.

    Yo no quito comentarios, creo en la libertad de expresión. El anterior lo retiró su propio autor.
    Saludos,
    Carolina

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  6. Rubén E. Rodríguez M.26 de mayo de 2010, 5:14 p. m.

    El único comentario que cabe aquí es reconocer la certeza de lo afirmado por doña Carolina. El gobierno abusa y vuelve a abusar sin que reaccionemos de una manera contundente. Se desmejora y se desmejora aún más nuestra calidad de vida sin que nos atrevamos a defender nuestro derecho a fortalecerla y aumentarla. Se nos miente y se nos vuelve a mentir sin ningún respeto a nuestra condición de seres pensantes. Se nos roba y se nos vuelve a robar el futuro de nuestros hijos sin que esto pareciera conmovernos. Como dice una gran amiga: “pa’mi que nos están echando lexotanil en el agua.” Tenemos once años advirtiendo lo mismo, pero nadie nos sigue en la búsqueda de una acción correctiva. Se necesita el concurso de todos para lograr el resultado deseado (deseado, pero aparentemente sin quererlo buscar) porque – como decía mi sabia abuela materna, la vieja Vicenta – “un solo palo no hace montaña”. Dicho de otra manera, “en la unión está la fuerza”. Nadie podrá vencernos si estamos unidos. A despecho de esta gran verdad de Perogrullo, parece ser que nos da miedo el éxito…

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  7. Rubén E. Rodríguez M.27 de mayo de 2010, 1:18 p. m.

    Traduje de la siguiente manera el comentario expresado por el lector Luís, para quienes no hablen inglés: << Temo que el tiempo para expulsar a HCh del gobierno venezolano se haya ido hace tiempo. En cuanto a la revolución caribeña de Chávez, sólo cabe una acotación de Joseph Goebbels: "Quienquiera que pueda conquistar la calle, un día conquistará el estado; cada forma de política de poder y cualquier estado en vías a la dictadura tiene sus raíces en la calle." >> Pienso que el autor de este comentario tiene mucha razón; pero – como toda Ley tiene su excepción - citemos a tal efecto a Maurice Druon, el autor de la serie de novelas “Los reyes malditos”: “Souvent la passion meurt de ce qui l’a fait maître”. Traduje esta frase al español como “A menudo la pasión muere de lo que la hace nacer”. A fin de acentuar lo que quiero expresar, me gustaría modificarla de la siguiente manera: “A menudo la pasión muere de lo [mismo] que la hace nacer”. Este punto es muy bueno tomarlo en cuenta porque suele suceder muy a menudo… Es lo bueno de la libertad de expresión porque conduce, en quienes no están cegados por el fanatismo, a un sano intercambio de ideas.

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